Tres años después: Misión Cumplida

Wilson Castro Quiroz
La República

Dicen que toda despedida tiene algo de triste. Es cierto. Creo que más de uno de nosotros lo ha experimentado. En el hogar, en el centro de estudios, en un centro de trabajo o en una relación sentimental. Es parte de la vida. Hay que pasarlo. Y es en ese instante en que se hace un nudo en la garganta, el corazón late más fuerte y las palabras salen del alma.
En lo personal, esta despedida es de un proyecto de formación de corresponsales escolares que llevé con La República desde el 2005. Una iniciativa que me ha traído muchas satisfacciones. Trabajar con jóvenes de tercer, cuarto y quinto año de secundaria ha sido alentador. Ellos tienen muchos deseos de aprender. Sólo hay que darles la oportunidad. Escucharlos, atenderlos y guiarlos.
Recuerdo perfectamente junio del 2005 cuando le propuse al editor regional norte de La República de aquel entonces, Enrique Paz Esquerre, contar con una página escolar. Don Enrique aceptó gustoso. Empezamos con una página central y luego con páginas semanales (todos los miércoles). Recuerdo que la primera nota fue sobre el destacado pintor mochero, Pedro Azabache, elaborado por la escolar Nelly Pérez corresponsal del colegio Modelo. Así se venía una avalancha de notas y entrevistas que enriquecían nuestra página. Luego, formamos el primer comité periodístico liderado por la alumna Evelyn Orellano, también del Modelo, quien ocupó ese cargo durante dos años (2005 y 2006).
Este año el comité periodístico fue liderado en una primera etapa por Jessica Guarniz Castillo y en una segunda por Pamela Cruz Castillo. Dos destacadas alumnas de los colegios María Negrón Ugarte y Marcial Acharán, respectivamente. Además de la página contamos con un blog el cual está bajo la responsabilidad de Angelo Chávez Rojas, ex corresponsal del colegio Rafael Narváez Cadenillas. Angelo ya lleva el periodismo en la sangre.
Pero como en todo proyecto, ha llegado el momento de la renovación. Por eso he decidido ya no continuar el próximo año en las actividades de la capacitación de los corresponsales. Considero que es hora de “oxigenar” el proyecto con sangre nueva, con otras ideas. Está en manos del diario designar a la persona que debe continuar este trabajo.
En ese contexto estas líneas van dedicadas a todas las personas que apoyaron este trabajo de proyección social. Quienes sábado a sábado, durante tres años consecutivos, tomaban parte en las capacitaciones. En las reuniones semanales de comité periodístico para ver las actividades. Mi más sincero agradecimiento. Al diario, fundado por ese gran luchador social como fue Gustavo Mohme Llona, por la confianza en el proyecto. También a directores y profesores de planteles. A uno de nuestros aliados estratégicos como es la Universidad Privada Antenor Orrego (UPAO). Me despido contento de haber alcanzado los objetivos trazados. Espero que el proyecto continúe. Han pasado tres años. Parece que fue ayer. Ha llegado el momento de la renovación. Misión cumplida. Dios los bendiga. Hasta pronto.