(Por Angelo Chávez Rojas) Seguimos con nuestro recorrido por los distintos destinos turísticos liberteños, en esta oportunidad nos trasladamos hasta Julcan, ciudad ubicada en la sierra liberteña a 3404 metros sobre el nivel del mar.Esta provincia es conocida mayormente por la producción de papa existente en el distrito de Carabamba, pero ahora demostraremos que Julcan no es solo papa, sino como muchos otros sitios tiene lugares turísticos muy hermosos, que esperan ser impulsados para poder surgir como destino turístico importante.El autobús nos ha dejado a pocos metros de la plaza de armas de la ciudad, se respira un ambiente diferente al de la ciudad sin contaminación con un cielo despejado muy hermoso, que nos muestra su claridad, las nubes que existen son blancas, que nos hacen pensar que verdaderamente existe un lugar más allá de la muerte.La plaza de armas es una combinación de lo colonial con lo moderno, el modelo es basado en las antiguas plazas existentes en todo el Perú, es decir ocho entradas que conducen al centro de esta, pero los adornos son de esta época, cada banqueta esta cubierta por un arco de colores, talvez con la intención de emular un arco iris, pues existían en ella los siete colores de ese fenómeno natural.Solo caminando unos metros mas nos encontramos con el coliseo de la ciudad una construcción moderna.Las calles existentes son empinadas, lo cual dificulta al viajero costeño la movilización a través de ellas, no existen muchos hoteles en la ciudad, pues no existen muchos turistas que se encaminen hacia esa provincia.Es hora de dirigirnos hacia un lugar desconocido para nosotros, según nos dijeron se llama El Rosal esta solo a quince minutos de la ciudad así que llegaremos rápido; para ello contratamos una combi, que nos lleve hacia ese lugar, a simple vista es un caserío muy pobre con muy pocas casas a su alrededor y una escuela en ella; frente a la escuela encontramos una cancha de gras, en la cual los jóvenes juegan fútbol después de las clases, pero lamentablemente, el campesino la ha utilizado para pastear a sus animales, damos un breve recorrido por el caserío, donde vimos la cruda pobreza en la que viven estos campesinos, gente que solo vive de sus cosechas, lo cual no le alcanza para poder subsistir cómodamente, pero a pesar de ello, los niños nos dan sonrisas como diciéndonos que a pese a la pobreza en la que ellos viven son felices.En la ciudad nos recomendaron este caserío pues nos dijeron que allí existían vestigios de una fortaleza pre inca, nos dirigimos hacia allí, el lugar queda en la cima del cerro en donde esta ubicado el caserío la subida exhausta pero no paramos, pues nos esperaba algo maravilloso en la cima.La visión que se tiene desde allí es espectacular, cerros imponentes, de gran altura, que nos muestran los peligrosos accidentes geográficos, pero que al observarlos de esa altura nos muestran su mejor cara para atraernos hacia ellos, pero tendrán que esperar otra oportunidad para conocerlos.Seguimos nuestro recorrido hacia los vestigios, no transcurrió mucho tiempo y observamos muros de piedra, las piedras estaban colocadas una sobre otra, pero por el tiempo se fueron deteriorando quedando solo parte de estas construcciones, que según nos dicen debieron haber sido muy altas, es probable que esta construcción tenia la intención de vigilar esa zona, pues el espacio es pequeño la ubicación es perfecta para controlar lo que pasa alrededor.El camino de regreso no es el mismo, salimos por el espaldar del cerro, nos encontramos con abundante vegetación característica de la serranía peruana, como yanasara y cola de caballo, también observamos parte de las costumbres del pueblo, como es hacer el famoso chuño, que consiste en dejar que la papa fermente para luego prepararla en sopas.Un lugareño nos dijo que el tenia en su hogar restos de cadáveres que había encontrado en el cerro y nos invito a conocerlos, gustosos nos dirigimos hacia su hogar. En un cuarto había adecuado un mini museo según nos comento, en el cual tenía restos óseos, lo cual nos motivo más para visitarlo. Entramos en la habitación y lo primero que capto toda nuestra atención fue una momia dentro de un anda cubierto por lunas, estaba en posición fetal estaba muy bien conservada aun tenia las indumentarias con la cual la habían enterrada, estaba en perfecto estado, nos hizo recordar a la famosa momia Juanita, pues el estado de conservación era increíble, aun conservaba su cabellera, y piel seca, según nos dijo el dueño, la encontró en la cima del cerro junto a otros restos, a la mano izquierda habían cráneos con las famosas trepanaciones craneanas de la cultura Paracas, he ahí nuestra interrogante, la cultura Paracas según lo que sabíamos no llego hasta estos limites, pero obtuvimos dos hipótesis, la cual fue que hubo un intercambio cultural entre Paracas y esta cultura desconocida, la otra hipótesis es que estos son restos incas, es muy probable que sea esta segunda pues la construcción en piedra y las trepanaciones craneanas fueron utilizadas por los incas.Luego de deslumbrarnos con ese gran descubrimiento nos dirigimos hacia la ciudad para enrumbarnos nuevamente hacia Trujillo, pero nos quedamos con la interrogante de siempre ¿Por qué estos pueblos al tener tanta riqueza cultural viven en una pobreza económica?Nuestro bus enrumba hacia Trujillo y a lo lejos dejamos Julcan y El Rosal, con la incertidumbre de saber si es que se volveremos a encontrarnos con estos recursos o serán presa de los famosos huaqueros que irán en busca de oro, deteriorando la cultura que allí existe, sólo el tiempo lo dirá.
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1 comentario:
weno a mi me parecio muy importante el tema por que lo lei pero no habia lo qeu estaba buscando en internet .
pero para mi fue algo muy importante sobre el dato que lo escribieron solo eso fue mi comentario weno me debo de ir .
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